«Jesús les contó a sus discípulos una parábola para mostrarles que debían orar sin desanimarse»
Lucas 18:1 NVI
La mayoría de los adolescentes creen que el matrimonio se empieza a construir solo cuando llega la persona indicada; pero no hay nada más equivocado que esta creencia, pues el matrimonio se construye desde que tengo uso de conciencia, y a menos que como Pablo lo dice, tengan el don de la castidad, todas las personas deben casarse.
Pero ¿por qué pensar en el matrimonio si aun soy muy joven o no tengo intensiones de casarme en el corto plazo? La respuesta aparentemente es muy sencilla, pero trataremos de explicarla en los siguientes párrafos.
Jesús nos recomienda que oremos para conocer la voluntad del Padre, y como lo mencionamos antes, a menos que tengas el don de la castidad, el propósito de Dios para tu vida es que te multipliques y ayudes a poblar la tierra, y para ello debes casarte. Por tanto, es importante entender que un primer paso de la voluntad de Dios es que cumplamos el primer mandamiento dado a Adán.
Ahora, ya teniendo claro que el primer propósito es casarnos, surge la pregunta, y ¿con quién, si la sociedad no me ofrece nada que garantice un matrimonio sano? la recomendación de Jesús es precisamente que oremos sin desanimarnos, y es que orar por alguien a quien aún no he conocido, aparentemente, es difícil, pero no es así. En el caso de Diana, su mamá siempre le enseño a orar por su esposo, y pedía a Dios ciertas características que Felipe cumplía, pero estas eran muy generales; en su oración su mamá no le enseño a orar porque Dios lo guardará de los peligros propios de una sociedad cada vez más sumida en la inmoralidad sexual.
Otra de las cosas por las que Diana no oro, fue por el corazón de su esposo, que Dios le ayudará a guardarlo y protegerlo de las personas que lo rodeaban y lo hirieron durante tantos años. Por tanto, aunque oro, muchas veces se desanimó y su oración no creció lo suficiente como para discernir lo que Dios quería que orara por su futuro esposo.
Ahora, a Felipe, ni le enseñaron a orar por su esposa, sus padres no tenian idea que eso se debía hacer, pues no fue el cristianismo que aprendieron. Diana se vio expuesta a muchas cosas que de alguna manera afectaron en el futuro su matrimonio y por ende su relación de pareja con Felipe.
¿Porque mencionamos la oración para mantener un matrimonio sano? Porque Dios escucha nuestras oraciones, y es en esas oraciones donde Dios va a escuchar tu corazón, te va a ayudar a definir que tipo de persona quieres a tu lado; en la oración podrás decirle a Dios cuáles son esas características que harán única a tu pareja.
Entonces ¿por qué es importante la oración sin desanimarse? Porque Dios usará tu oración para guardar a tu pareja de tal forma que cuando llegue el momento en que Dios disponga cada detalle para que se conozcan, y entiendan que son el uno para el otro, podrán decirse: «he orado por ti, aun antes de conocerte, y eres todo lo que le pedí a Dios».
¿Qué frase quieres decirle a tu futura pareja cuando la conozcas?
Hola señores esta historia me recordo muchas cosas que me sucedio las cuales todavia no supero,,en este momento estoy separado pero conociendo del señor y teniendo cuidado con las falsas doctrinas que enseñan .
Siempre ese primer amor te marca y si no lo curas suele afectar tus futuras relaciones ,en este momento quisiera recuperar a mi esposa pero ya no siento lo mismo nunca nos casamos por la iglesia fue por otro sistema por lo que creo que este fue uno de los problemas para no estar juntos.
Me gustaria saber como puedo superar esos pensamientos de mi primer amor los cuales me acompañan en algun momento claro fuen una relacion muy bella pero la perdi y ahora me interesa que yo salga adelante y ella siga siendo feliz lo cual espero que sea asi espero no confundirlos, termine con mi ex esposa y durante el tiempo que estuve con ella y ahora tengo recuerdos de mi primer novia la cual no pudo ser mi esposa por que la deje ir
Hola Carlos,
Gracias por escribirnos y compartir tu historia.
La mejor forma de superar el «primer amor», es primero entender que no existe un primer amor terrenal sino que el amor de Cristo debe ser siempre nuestro Primer Amor. Lo segundo, y no menos importante, es entender que Jesús nos invita a perdonar tanto lo que hicimos como lo que nos hicieron. Según comentas, perdiste ese «primer amor», y debemos aclararte que las personas no se pierden como si fueran objetos, las personas se alejan o se acercan; y es precisamente este el primer paso que debes dar: perdonarte a ti mismo por haber hecho cosas o haber dejado de hacer cosas, que alejaron ese «primer amor» que marco tu corazón. Lo segundo que debes hacer es pedirle a Dios que sane las heridas que dejo en el corazón, el que ese primer amor se alejará de ti; lo tercero y no menos importante, es entender que si tu estas bien, tu entorno estará bien; y para estar bien debes también perdonar a ese «primer amor», por haberse alejado; esto te ayudará a estar mejor, pues recuerda que el segundo mandamiento es amar a los demás como a ti mismo; y en eso es lo que debes trabajar, pues no puedes amar a los demás sino te amas a ti mismo; al amarte a ti mismo es cuando vas a empezar a superar ese «primer amor», ya que podrás comprender que si Dios no permitió que esa persona estuviera contigo es porque no era verdadero amor, sino tal vez solo enamoramiento, apego, obsesión, etc. Cuando superes los pensamientos de ese «primer amor» estarás listo para empezar a trabajar en recuperar las personas de tu entorno, eso incluye a tu ex esposa; con seguridad podemos decirte que si trabajas en ti, podrás amar a los demás con el amor de Cristo, lo que redundará en mejores relaciones personales.
Para recuperar a tu ex esposa, debes trabajar mucho, primero en ti mismo, como lo dijimos antes, y segundo en reconquistarla como lo hiciste la primera vez, pero con un modelo superado; debes acercarte de nuevo a ella y retomar la etapa del descubrimiento, la cual consiste en conocer quien es ella, que le gusta, que no lo gusta, cual es su comida favorita, su color favorito, cosas que en las mujeres son detalles importantes, pero que en los hombres pasan desapercibidos. Debes primero amarla como Cristo nos ama, pues recuerda, que al esposo se le da el mandamiento de amar a su esposa como Cristo amo a la Iglesia, así que cada día debes tomar la decisión de amar a tu ex esposa, y ese amor cada día crecerá de forma sobre natural.
Tu debes convertirte en un testimonio del amor de Cristo, y no esperar que los demás se conviertan en el amor de Cristo, para amar como Él nos ama.